El símbolo de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) nació el 12 de junio de 1976, por lo que cumple 46 años. En principio fue creado para prevenir los incendios forestales y luego se transformó en todo lo que significa el cuidado de la naturaleza
Desde sus inicios acompaña a las y los funcionarios de CONAF en todas las salidas a terreno y, sobre todo, en las visitas a los jardines infantiles y colegios, donde Forestín se transforma en un gran “vehículo comunicante” del cuidado y respeto por la naturaleza y la prevención de los incendios forestales. Este símbolo de la conservación de nuestros ambientes naturales representa a un coipo, roedor nativo de Chile.
En este nuevo cumpleaños, junto con recibir saludos en sus redes sociales de Twitter (https://twitter.com/ForestinChile), Facebook (https://www.facebook.com/ForestinChile) e Instagram (https://www.instagram.com/forestinchile/), estuvo promoviendo la protección activa de la flora y fauna, especialmente entre las niñas y niños, y también los adultos, es decir, la familia, a través de un cuaderno descargable con actividades para difundir el conocimiento y acciones destinadas a potenciar el resguardo del medio ambiente. Este cuaderno se dio a conocer este cumpleaños.
Cabe recordar que el coipo (Myocastor coypus) es una especie oriunda de Chile, comúnmente visto en la comuna de Pirque, aunque no endémica. De las 50 especies de roedores chilenos, el coipo es el único adaptado a la vida acuática y es además el más grande. Su tamaño puede alcanzar hasta 1 metro de longitud y su peso a los 8 kilos. Es un mamífero robusto, provisto de una cola negra, larga y redondeada, escamosa y casi pelada. El color de su piel varía desde el café amarillento, al café rojizo y tiene dos capas de pelo: el pelo de guarda, que es largo y brillante, y el pelo interior, que es corto y muy suave.
Habita lagunas, lagos, ríos y pantanos, en la zona comprendida entre la Región de Coquimbo y la Región de Magallanes, y se alimenta de plantas acuáticas y algunos moluscos.