El cambio de estación significa el fin del período de letargo de los insectos, por lo que desde el centro de investigación indican cuales afectan a la agricultura en esta época y cómo manejarlo
De acuerdo a lo informado por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA), la primavera comienza este jueves 22 de septiembre.
El momento estará marcado por el llamado equinoccio de primavera, que sucederá específicamente a las 22:04 horas de Chile. Esto es un fenómeno astronómico que sucede cuando el Sol pasa desde el hemisferio norte hacia el hemisferio sur, cruzando la Línea del Ecuador y provocando que el día tenga la misma duración que la noche.
Desde el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) La Platina recalcaron que con el aumento de las temperaturas, el período de hibernación de los insectos está llegando a su fin, lo que dará paso a la temporada de reproducción y alimentación.
De esta manera en INIA entregó las claves para el reconocimiento de las plagas más frecuentes que afectan hortalizas en la Región Metropolitana.
Como consecuencia del cambio climático, muchas especies han llegado al país y se han adaptado, por lo que el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), se encuentra permanentemente monitoreando esta situación. Por esto mismo, la primera recomendación para los agricultores es observar permanentemente los cultivos, de manera de poder detectar tempranamente las plagas presentes en la región o nuevos insectos que puedan aparecer.
Nancy Vitta, entomóloga e investigadora de INIA La Platina señaló que la tolerancia de los insectos al calor varía entre individuos e incluso con la edad, la morfología de las alas y el color o tamaño del cuerpo. “Sabemos también que los insectos, aunque son ectotérmicos, lo que quiere decir que dependen de factores externos para obtener calor, pueden responder a este, a través de mecanismos fisiológicos y bioquímicos, que involucran al sistema nervioso. Estos comportamientos les permiten mantener su temperatura corporal dentro de ciertos límites óptimos, pero pueden afectarse por la pérdida de hábitat al no encontrar sitios donde refugiarse de las altas temperaturas”
Entre las plagas más frecuentes que se observarán con la llegada de la primavera, se encuentran polillas, moscas, gusanos cortadores y medidores, Chinche Pintada, pulgones, y algunos tipos de ácaros, entre otras.
Principales Plsagas de la Región según INIA
Los gusanos cortadores provienen de polillas nocturnas que afectan cultivos de repollo, espárrago, porotos, pepino para ensalada, tomate, zapallo, apio, brócoli y coliflor entre otros, produciendo disminuciones productivas de diverso tipo.
La Polilla del tomate o Tuta absoluta presenta deterioros en hojas, debido a las galerías que forman por su tipo de alimentación y en los frutos de este cultivo.
Por su parte, la Polilla de la papa Phthorimaea operculella, se considera una plaga clave o primaria del cultivo y su daño económico puede ser significativo sin las medidas adecuadas de mitigación, con grandes porcentajes de pérdidas dependiendo de la zona geográfica afectada.
Otros insectos como la Mosquita blanca de los invernaderos y trips son comunes en los próximos meses, destacando la presencia de pulgones que colonizan plantas, que además pueden ser transmisores de virus y rápida resistencia a insecticidas por partenogénesis y ciclos biológicos cortos, dificultando su manejo.
La Chinche pintada Bagrada hilaris, es una plaga que ingresó a Chile en 2016 y está presente en la Región Metropolitana. Gracias a su constante monitoreo, recientemente se han obtenido resultados positivos de mitigación, por lo que su identificación es muy importante para proteger los cultivos de Brassicas como brócoli, repollo o coliflor, y otras hortalizas crucíferas de hoja, que pueden reducir sus rendimientos por marchitez, manchas necróticas y otros problemas que se presentan con el ataque del insecto a los puntos de crecimiento de las plantas.
Recomendaciones para Adelantarse a la Plaga
Para la investigadora es importante adelantarse a mantener las poblaciones al mínimo en los cultivos, mediante el Manejo Integrado de Plagas (MIP). “Esto se logra con monitoreo, utilización de trampas pegajosas, trampas de agua (Moericke) y feromonas, siendo fundamental el manejo cultural de los residuos de cosecha, a través de su incorporación al suelo para evitar que se transformen en hospederos para las plagas. Además, se recomiendan los cultivos trampa, el control biológico y variedad de especies en el hábitat natural, incorporando bandas florales alrededor de los cultivos para atraer plagas como pulgones y otros insectos benéficos como controladores biológicos y polinizadores”.
Desde INIA La Platina están en permanente contacto con Grupos de Extensión Tecnológica (GET) en las comuna rurales de la Región Metropolitana, trabajando en talleres para apoyar estas prácticas. Además, actualmente se está desarrollando el Programa de Recuperación Productiva de las Áreas Afectadas por la Chinche Pintada en la Región, financiado por el Gobierno Regional Metropolitano de Santiago, que incluye capacitaciones en Manejo Integrado de Plaga para agricultores de 12 comunas con presencia del insecto, contribuyendo a dar soluciones a los pequeños productores.