La actividad se realizó en el santuario San Francisco de Lagunillas bajo el marco de reactivación económica para pequeños y medianos propietarios forestales.
Durante esta semana la Corporación Nacional Forestal (CONAF) realizó un conversatorio, donde Nathalie Joignant, Seremi de Agricultura de la Región Metropolitana, inició sus actividades en el programa de reactivación económica para pequeños y medianos propietarios forestales.
La iniciativa tuvo como finalidad conocer el modelo de manejo forestal en la adaptación climática en los santuarios de la naturaleza San Francisco de Lagunillas y Quillayal, y la Cascada de las Ánimas, de la comuna de San José de Maipo; y San Juan de Pichi de la comuna de Alhué.
“Hemos venido a conocer esta experiencia que nos permitirá restaurar localmente los ciclos hidrológicos de la cuenca ayudando a fortalecer nuestra agricultura familiar campesina y dar mayores oportunidades de empleo para el mundo rural, en este marco de reactivación económica”, expresó la Seremi de Agricultura.
Esta reactivación nace bajo el alero de una pandemia, de una mega sequía que ha superado la década, y de una ola de desempleos, cuyo principal objetivo del programa es fomentar y generar empleos, a través de la recuperación de ecosistemas forestales. Esto, mediante actividades que consideran manejo de bosque nativo, preventivo y sanitario, forestación y recuperación de bosques afectados por incendios forestales o cambio climático, entre otras.
Dicho proceso se realiza por medio de licitación pública, que ha entregado “una oportunidad para que los territorios rurales puedan tener mano de obra”, comentó Carlos Ravanal, jefe del departamento de bosques y cambio climático de CONAF de la Región Metropolitana.
Además, añadió Ravanal “un encargado de la CONAF se hace cargo de lo que está definido en este programa, por lo tanto, tiene un énfasis social, y también aprovechamos la instancia de hacer conservación, cosa de ir generando un modelo tecnológico que se adapte a las necesidades de la Región Metropolitana”.
Durante la actividad realizada se observó el Santuario de la Naturaleza San Francisco de Lagunillas y Quillayal, cuya superficie intervenida fue de 35,01 hectáreas, destacándose la plantación suplementaria de surcos y zanjas de infiltración, acompañadas de Obras de Conservación de Agua y Suelo (OCAS).
De esta manera, los trabajos ejecutados permitieron colocar 2 limanes con 12 árboles nativos cada uno, 30 medias lunas con 30 árboles cada uno y 22 zanjas de infiltración con 66 árboles. La etapa de plantación contempló el suministro de compost a cada casilla, saturación con agua, con el objetivo de plantar las diversas especies nativas e instalar los protectores, tutor y el sistema de riego.
Así lo detalló, Carlos Lizama, Administrador del Santuario San Francisco de Lagunilla, “los resultados han sido súper positivos y hoy pudimos conversar con otros santuarios y los resultados también fueron muy buenos. Desde el punto de vista de flora estamos tratando de hacer una restauración a lo largo del país, que están siendo afectadas por el cambio climáticos”.
Por su parte, Nathalie Joignant, Seremi de Agricultura de la Región Metropolitana, manifestó “hemos visto cosechas de agua, empleabilidad verde donde tenemos el desafío de restaurar un millón de hectáreas de aquí al año 2030”.
Desafío que pretende sumar nuevas áreas verdes para ejecutar acciones de restauración forestal en lo que se ha declarado Santuarios de la Naturaleza, como son San Francisco de Lagunillas y Quillayal, entre otros.
